A la hora de revelar el origen que explicaría su posición existen diferentes leyendas populares, a cada cual más singular.
El Buey o Búfalo es el segundo signo del zodiaco y es uno de los más conservadores. Se encuentra muy unido a la familia y se rige por la tradición y las costumbres. Las “personas Búfalo” son bastante trabajadoras, además de constantes, aunque también son algo posesivas y celosas. Sus rabietas suelen ser bastante sonadas.
El horóscopo chino guarda relación con el calendario chino. Éste se trata de un calendario lunar regido por los ciclos de la Luna, no por los del Sol, y se compone de períodos de 12 años. A cada uno de estos años le pertenece uno de los animales anteriormente nombrados. Además, dependiendo del año en cuestión, a cada uno de estos animales le corresponde un elemento entre Metal, Tierra, Fuego, Madera y Agua.
A la hora de calcular tu signo y elemento del horóscopo chino, has de tener en cuenta tu fecha de nacimiento. Saber el año es suficiente para saber el animal al que perteneces. De ese modo, Los Bueyes o Búfalos son aquellos que han nacido en los siguientes años: 1901, 1913, 1925, 1937, 1949, 1961, 1973, 1985, 1997, 2009, 2021.
Sin embargo, para conocer a fondo ciertos detalles específicos relacionados con la personalidad, las cualidades e incluso el destino más próximo es necesario utilizar la fecha completa, es decir, mes, día e incluso hora. Y es que cuantos más datos se tengan, mayor será la información obtenida.
Sea como sea, los nacidos en el año del Búfalo son personas muy seguras de sí mismas y tienen muy claro cuáles son sus objetivos en la vida. Otra cosa es que se cumplan o sean capaces de obtenerlos, aunque por perseverancia no será. Son muy equilibrados y poderosos, y suelen sacar fuerzas de donde sea para salir de los baches que van surgiendo en el camino.
Morfológicamente hablando, se dice que no es difícil encontrar a “personas Búfalo” con hombros anchos y una gran capacidad o corpulencia ósea.
En líneas generales podríamos definir a los Bueyes o Búfalos como personas bastante ambiciosas y trabajadoras, así como tenaces, pacientes, metódicos, emocionalmente estables, prácticos y también intolerantes, serios y rígidos.
El esfuerzo, la perseverancia y el trabajo duro representan la actitud del Buey. Todo ello está relacionado con la prosperidad que obtiene con su empeño y su capacidad irrefrenable. Además, es paciente, un valor escaso muy estimado en la sociedad actual en la que vivimos.
El Buey es capaz de hacerse responsable de grandes tareas sin ningún problema. Sus metas las tiene muy claras y su organización le llevan a plantearse sus objetivos de forma clara para perseguirlos. El equilibrio interior de la “persona Buey” es perfecto para ambicionar ciertas cosas. La idea es sortear los obstáculos y aprovechar su fuerza y energía increíbles.
El Búfalo o Buey es líder por naturaleza. Es prioritario contar con un buen ambiente de trabajo y estar tranquilo para poder desarrollar todo su talento. Es sistemático, inteligente y utiliza la lógica en su día a día, simplemente es imparable. Suele mostrarse muy elocuente y sus sentencias son claras, aunque no es muy hablador. Su moralidad y espiritualidad están por encima de todo, algo que tiene bastante claro, de hecho, no se rige por los ideales de los demás sino por los suyos propios.
Si te cruzas en el camino con una “persona Buey”, puede que la veas aburrida y poco imaginativa. En realidad es así, además, no le gusta meterse en discusiones y las evita a toda costa. Lo único que quiere es paz, armonía y seguridad, un escenario vital que le da la confianza necesaria para trabajar con fuerza.
Tiene bastante sentido común, además, es altruista y vive para lo emocional y espiritual, aunque también para lo material, para qué negarlo. El Buey no asume riesgos y mantiene al día sus deudas porque la sola idea de estar endeudado le aterra. No le gustan nada los cambios; la seguridad y la estabilidad es lo más importante para él. Su vida está ordenada y estudiada con detalle para no arriesgarse con nada.
Es modesto, tranquilo, comprometido y serio, valores por los que es apreciado. Cuando se le mete algo en la cabeza, va a por ello y se mantiene firme hasta el final. A la hora de perseguir sus objetivos es constante y no le importa ir lento pero seguro. Es un trabajador nato, lo cual no significa que sea competitivo. Lo cierto es que es muy buen compañero y su lealtad y honestidad no tienen precio.
En cuanto a las relaciones sentimentales, el Buey es bastante celoso. Son fieles, algo que exigen a su pareja, y se hacen querer. Suelen ser dulces, cariñosos y apasionados, aunque también son posesivos.
El Buey o Búfalo es bastante disciplinado y organizado, lo que le impide ser imaginativo y dejarse llevar por impulsos. Esto es un freno a la hora de sobresalir en empleos creativos. Si puede elegir, prefería dedicarse a un trabajo en el que estuviera él solo para encargarse personalmente de la productividad y estar tranquilo. Lo de ir rápido no va con él y necesita desarrollar sus habilidades y progresar a su ritmo.
Es un profesional como la copa de un pino. Se puede confiar en él y trabajar a su lado abiertamente. Ahora bien, aunque no le gusten las confrontaciones, si ha sufrido una traición, tendrá el coraje de seguir adelante y enfrentarse a sus adversarios. Teniendo en cuenta esta información, las carreras que mejor le van al Buey o Búfalo son las siguientes: cocinero, político, maestro, economista, contable o arqueólogo.
Este 2024 es su año, por ellos es necesario que durante el año del Buey 2024, el Búfalo controle su ira y no se exceda en ningún caso, menos aún con los seres cercanos. No todos tienen el mismo empeño y la misma fuerza que él, algo que tiene que entender, metiéndose en su piel. Se puede decir que este año, que acabará el próximo 31 de enero de 2024, es bastante bueno para el Buey o el Búfalo, siempre y cuando no pierda la paciencia.
Durante este año, el Buey debe seguir teniendo claro cuáles son sus metas y ser paciente. Solo así recogerá más adelante los beneficios de la cosecha. Es posible que tenga que pasar por malas experiencias, pero éstas solo pueden ayudarle para ser firme y mantenerse fuerte, seguro y confiado.
Puede ser que el Buey cierre una puerta al pasado y sea capaz de eliminar de su vida aquellas relaciones que no le compensan para adquirir otras más sanas en lo que se refiere a la amistad, el trabajo y el amor.
Si el Buey tiene pareja pueden existir disputas temporales como consecuencia de la falta de comprensión de la que hablábamos. Ciertos problemas que le preocupaban pueden desaparecer durante este año, siempre y cuando se dé cuenta de la superficialidad que las envuelve.
Es posible que la visita inesperada de un pariente perturbe la paz y el sosiego bajo en el que vive el Buey, más aún si esta visita se alarga en el tiempo. Las herencias y las reparticiones de propiedades con familiares pueden generar malestar en el Buey. En ese caso, la “persona Buey o Búfalo” debe estar tranquilo y evitar cualquier conversación que pueda acabar en enfrentamiento.
El nacimiento de un bebé durante el signo del Buey en 2024 es el ideal para una madre o un madre Buey. Si los padres Bueyes o Búfalos quieren mantener una relación buena con sus hijos, es mejor esperar al año del tigre, esto es, en 2024, pues este signo resulta compatible con el Búfalo.
En lo que queda de año, el Buey o Búfalo aún cuenta con momentos favorables. Es el caso del diciembre de 2024. Por suerte, su periodo menos favorable, el mes de la Cabra, ya ha pasado.
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Bufalo – Buey
Años: 1901, 1913, 1925, 1937, 1949, 1961, 1973, 1985, 1997, 2009, 2021.
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